Están especialmente diseñadas para que en ellas se lleve a cabo la última fase de incubación de las huevas, la eclosión y reabsorción del saco vitelino. El flujo de agua entra por el inferior de la caja, atraviesa la reja donde se sustentan las huevas y sale de nuevo al tanque.
Pueden ser de dos tipos en función de si el alevín se mantiene dentro de la caja una vez eclosionado o sale para el tanque. En el primer caso la reja es de acero inoxidable o aluminio troquelado con agujeros circulares de 2 mm de diámetro, y en el segundo caso la reja es de acero o aluminio troquelado con sección alargada de 3 x10 mm.
Las rejas pueden ser de acero inoxidable AISI 304 ó 316 ó aluminio, y el armazón se puede fabricar en PE, PP o PVC.
En fabricación estándar existen dos modelos adaptables a los tanques de alevinaje de ancho 300 y 500 mm.